Blogia
sergiobrau

Justicia ¿seguro?

Nunca he entendido, y a mis años ya creo que aprenda poco sobre legislación y medicina. Quizá por eso admiro a los que consiguen entenderla o estudiarla. En el caso Gurpegui, hace muchos meses ya, que todos sabíamos que el positivo de Gurpe, era positivo de verdad. Al menos yo. Porque si la teoría de Sabino Padilla fuera cierta, digo yo que en los siguiente controles, también debería haber dado positivo por 19 norandrosterona. Como quien entienda de esto seguro me podrá rebatir, digo y dejo bien claro que es una opinión o una conclusión fácil de llegar, quien sabe si cierta. Pero si a pesar de todo esto, el proceso está tan podrido, lleno de errores y negligencias, se me antoja totalmente injusto que el jugador tenga que pagar una pena, con tantos culpables que hay por el camino. No quiero ponerme a detallar todas ellas, y vuelvo a repetir que no entiendo nada de leyes, pero mi cerebro, no es capaz de aguantar una injusticia tal. Se supone, que los tres botes de muestra que tiene que llenar un jugador cada vez que le toca hacer pipí, se meten en una nevera refrigerada para su traslado al laboratorio correspondiente. Bien: GUrpe hace pipí en tres botes, y como si se tratara de Pepe Gotera y Otilio, la nevera se transforma en una bonnita y cómoda bolsa de plástico, de esas del Corte Inglés. Del fresquito (5 grados de la nevera), pasamos a los más de 20 de media que hace en el mes de agosto por la noche. Ya sólo con eso, con esa negligencia, no se puede sancionar a nadie. Porque la orina ya no es ni estable (lo es pero parece que no importa), ni fiable. Y de esos tres botecitos, desaparece uno. ¿Dónde está? ¿Podemos soportar tan maña trampa? Les digo algo que tengo clarísimo: con ROnaldinho hubieran empleado un congelador en lugar de nevera, un vuelo charter, y hubieran aparecido 7 u 8 botes si hubiera sido necesario. Eso sí: Gurpegui ha tenido que aguantar de todo, y va a tener que aguantar una fortísima sanción, tan injusta como inmerecida, porque repito que no dudo del positivo del jugador, pero con las lamentables actitudes del laboratorio que analizó el caso, resulta vergonzoso que se pasen por alto. Eso sí, con la justicia ya se sabe. Tiene un nombre tan falso como mentiroso, porque no sólo es en este caso, sino que esta, jamás en la historia ha sido fiel a su nombre. Ahora, como bien dijo Fernando Lamikiz, toda la familia rojiblanca vamos a apoyyar a Carlos, todos. Yo, me siento parte de ella, y desde luego que lo haré. Que no te quepa la duda Carlos, todos estamos contigo, y algún día, los responsables pagarán por ello.

0 comentarios