Estoy de vuelta

Pocos lo habrán echado de menos, pero vuelvo y no me voy.
Desde lo último, allá por los inicios de marzo, han pasado muchas cosas, pero no me referiré a ellas porque lo pasado, pasado.
Ayer me ilusioné con el ascenso a primera (llevaba la camista del éibar), y hoy llevo la blanquinegra del Real Unión.
Hoy me tocará emocionarme con las eliminatorias del ascenso a Segunda, aunque le pondré un ojito al Barbastro.
Ahora que ya no hay fútbol (no considero ni reseñable ése sacaduros que se juega en alemania), y aunque queden los sub-20 dirigidos por una sombra (yo no reconozco en ése de la gorra al que coordinó Lezama y entrenó al Athletic en los 90), poco nos queda para pasar divertidos el fin de semana.
Y como por fastidiar los americanos llevan otra hora, se hará extraño esperar a las 7 para ver la carrera de fórmula 1.
En fin. Que cuando dejan de jugar los equipos de primera, nos damos cuenta (yo sigo cualquier cosa: no me metan en el saco), nos damos cuenta de que hay otras cosas, otros partidos, otros equipos.
Por cierto: aquí nadie mueve ni fichas, ni fichajes. Tiempo habrá.
Bienhallados y gracias si leéis esto en cualquier caso: lo siento pero estoy de vuelta.