Blogia
sergiobrau

40.000 gritos.

"Que ganamos fijo. ¡No me jodas hombre! ¿cómo no vamos a ganar?" Era mi respuesta a la socarrona preegunta de qué ibamos a hacer contra el Zaragoza. Ilusión en el corazón. Viaje larguísimo, creo que pocas veces se me ha hecho tan largo. Y por fin el estadio, casi a reventar cuando entramos. Y ese banco repleto, donde siempre nos sentamos. Y nada más llegar allí que salen. Y aplaudimos, y pita Medina y empezamos a gritar, a animar. Pero pasa poco. No apretamos, no mordemos. ¡Pum! Ostia que susto. Milito al palo. Pero el susto sigue en mi cuerpo. GOl de la Real. Mierda, quiero que palme. Bueno, me da igual. Me centro en lo mío. Seguimos animando. Mucha voluntad, pero juego nulo. Gol del Alavés. ¡No me jodas Javi! ¿en serio? Lo pregunto por sacarme la incredulidad de encima y pagarlo con alguien, porque cuando él me lo dice sé que es verdad. Esta es buena, una dos que casi entran y la mano que la veo hasta yo. Medina no la pita y pierdo los papeles por primera vez en un campo. Me acuerdo de su madre más de quince veces en medio minuto. Javi me tranquiliza pero necesito desquitarme. En el descanso el bocata (malíísimo por cierto pero lo que cuenta es la voluntad querido), no me hace efecto. Como por inercia, por comer pero sin sentir que como. Va ganando el Espanyol, el Mallorca empata. Bueno, vamos a ver. La segunda parte será otra historia. Pero no. Todo se repite. Gol de la Real. Bueno, a estas alturas me rindo. Vale, nos quita al Cádiz del medio. Me tendré que aguantar. Y gol del Alavés. ¡Venga ya! Si, van 2-0 y el athletic... ¡Puuuuuum! Otro palo. ¡Dios! Joder, estos cabrones nos ganan. Zapater es Dios en medio campo. No hay nada que hacer. No hay ideasy encima nos la van a clavar. Ya está. Ewerton lo mete ahora. ¡Joder Iñaki, qué paradón! Se me ha parado el corazón por momentos. He visto el 0-1 muy cerca. Minuto quince. Lo digo: Javi, quedamos aquí el día del Barça. Dice resignado que vale, que bien. Se va Julen, me levanto para aplaudirle y darle las gracias como siempre. A ver que hace el chaval. Joder el chaval. Llegan más goles. El Alavés con 10, el Cádiz marca. Venga vamos coño. Recuerdo la jugada porque he escuchado mil veces el gol, y no se me olvidará nunca, como el gol de Julen contra el Depor un lunes que nos llevó a la Uefa. Está en la línea de banda, se le va a ir el balón, Milito sale a por él. La pierde fijo. ¡Zas! le regatea. Joder vaya regate. Va Poncio. ¡Lo mismo! El campo flipa. Hay un pase para Yeste. Dejo de oír la radio, hay dos segundos donde no sé que pasa. No escucho al campo. Sólo a Javi: ¡gooooooooooooooool! Me levanto enloquecido, se lo grito al muchacho zaragocista que tenia al lado en su oreja, empiezo a golpear como loco una chapa que hay sobre mi sin dejar de gritar como loco. Me duelen las manos de aplaudir. Tenuemente escucho a Alberto Santacruz aullar el gol vergonzosamente afónico de la emoción. Siempre supe que sería un crack. Todo el campo grita y yo no quiero ser menos. De allí al final no sufro. El Athletic defiende bien. También me levanto para aplaudir a Ustaritz. ¡Vaya partido chaval! Pita Medina el final y estalla el campo. Estallan 40.000 gargantas, 40.000 gritos de libertad, de alivio, de alegría. El Athletic ha jugado horrible, pero ha ganado que es lo que importa. Me quedo quieto en el sitio. Le han pitado a favor un penalti al Cádiz. Cuando lo marca Lucas Lobos los dos gritamos y unas señoras se asustan. ¿Pasa algo? No que ha marcao el Cádiz y tenemos familia allí. Que cerca está la salvación coño. Recuerdo las lágrimas de Yeste y Llorente. Las entiendo. Los han puteao mucho. Sobretodo a Fran. Sé que lo siente, todos lo sienten, pero esas lágrimas valen mucho. No se me van a olvidar. Queda muy poco. Vemos la luz. Casi está.

1 comentario

Alberto Santacruz -

Siempre seras bien recibido en Bilbao y siempre tendras aqui a un amigo.